El alcalde de Sevilla, el socialista Juan Espadas, ha defendido el "trabajo titánico" que ha realizado su equipo durante estos tres años para poner "en marcha" a la capital de Andalucía y crear un Ayuntamiento "más fuerte, más útil y más social", teniendo en cuenta la "parálisis y la falta de proyecto" existente en años anteriores a su llegada.
A preguntas de los periodistas, tras informar sobre nuevas estrategias en materia de mejora de accesibilidad, Espadas ha mostrado su convencimiento en la capacidad actual de la ciudad para resolver los retos que se presenten, apostando por que "en cinco años sea radicalmente diferente" de lo existente en 2015.
Afirma que el mandato dejará una ciudad cuya mejoría se constatará en los indicadores de generación de empleo, de actividad económica, en su capacidad para resolver necesidades sociales o por "haber sacado determinados barrios en riesgo exclusión de la situación en que se encuentra". "Un ayuntamiento más fuerte, útil, más social y más atractivo, que ilusione a los ciudadanos y a la iniciativa privada", recalca.
Recuerda que a su llegada a la Alcaldía la ciudad estaba "completamente parada, pero no solo por el escenario postcrisis, sino también en la inversión pública y carente de ilusión y de proyecto de ciudad, de un enfoque estratégico de cara a los próximos diez años".
"Hemos sido capaces de poner de nuevo la maquinaria en marcha, que empiecen a desbloquearse proyectos urbanísticos importantes, generadores de empleo, que podamos hacer planes de vivienda, plantear iniciativas que generen riqueza y resuelvan necesidades en los ciudadanos, reconstruir líneas de ayudas sociales y ante las personas en riesgo y hemos generado confianza en que Sevilla sea una ciudad atractiva a la inversión, a los visitantes, a desarrollar un proyecto con visibilidad internacional con otras ciudades andaluzas", sentencia.
Así, deja claro que, en estos tres años, con un equipo pequeño de concejales, se han "dejado la piel" para poner de nuevo a Sevilla en marcha, "dispuesta a ganar el futuro", aunque advierte de que quedan "muchas asignaturas pendientes fruto del parón tan tremendo que hubo en la inversión pública sobre todo". "Soy plenamente consciente que los próximos años serán complejos y de grandes retos", resalta.