La alcaldesa, Patricia Cavada, y la concejala de Inclusión y Políticas Sociales, Ana Lorenzo, han mantenido recientemente una reunión con representantes de la Asociación Isleña por la Ciudad Accesible (AICA), un colectivo que ha nacido con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas con algún tipo de discapacidad, movilidad reducida y dependencia, contribuyendo con sus aportaciones al objetivo que se impulsa desde el Gobierno local: la total eliminación de las barreras arquitectónicas en San Fernando.
Durante el encuentro, que se enmarca en la acción del Gobierno municipal de comunicación constante con los colectivos y asociaciones de la ciudad cuya labor está enfocada hacia personas con discapacidad, ha servido para que las representantes de AICA hicieran entrega a Cavada y Lorenzo de una propuesta de ordenanza para regular la adaptación para personas con discapacidad de los espacios y edificios públicos de la ciudad.
Por su parte, la regidora isleña y la concejala de Inclusión y Políticas Sociales expusieron la planificación que ha realizado el Ayuntamiento para la mejora y adaptación de estos recintos de uso público.
De esta forma, detallaron en el encuentro la adecuación realizada en el Castillo de San Romualdo para que este histórico recinto sea universalmente accesible y pueda abrir sus puertas próximamente al público sin ningún tipo de barrera arquitectónica.
También visitaron juntas el Centro de Congresos y Exposiciones de la ciudad, comprobando
in situ la falta de accesibilidad para personas con movilidad reducida que tiene este edificio, como en el auditorio principal Lázaro Dou, cuyo escenario es inaccesible para personas con movilidad reducida “lo que produce una discriminación tangible hacia estas personas, ya que no pueden acceder al mismo a la hora de recoger un premio o, por ejemplo, realizar alguna intervención en el mismo”, apunta Cavada.
El actual Museo Histórico Municipal, ubicado en la calle Real, ha sido otro de los edificios municipales que han visitado Cavada y Lorenzo junto a la asociación AICA para comprobar también sobre el terreno las limitaciones que contiene este espacio. Las propias representantes de AICA reconocieron haber sufrido “en varias ocasiones” las limitaciones que sufre este espacio, dado que la actual rampa existente para discapacitados “cuando funcionaba era insegura, pero es que ahora ni funciona”, señalaron.
Asimismo, los aseos para señoras y caballeros del Museo Histórico Municipal tampoco son accesibles y ni siquiera la entrada al propio edificio.
Así, Patricia Cavada les detalló el proyecto municipal para acabar de forma ordenada y paulatina con todas estas barreras arquitectónicas que durante años han formado parte de la ciudad, de forma que se permita y se facilite el tránsito de personas con discapacidades y para cumplir también, de esta forma, con las directrices recogidas en el marco normativo actual.
Las representantes de la mencionada asociación también mostraron su satisfacción tras recogerse por parte del Ayuntamiento una de sus iniciativas planteadas en encuentros anteriores: la inclusión en los pasados Carnavales de una carroza especialmente adaptada para personas con movilidad reducida.
“Tenemos que escuchar todas las opiniones y contar con todas y cada una de las asociaciones de la ciudad que trabajan y apuestan, como este gobierno, por la inclusión, la igualdad de oportunidades y por una ciudad en la que todos y todas podamos transitar sin barreras arquitectónicas, haciendo con ello una ciudad más justa y sin discriminaciones”, ha manifestado Patricia Cavada.