Alrededor de un centenar de trabajadores de la empresa auxiliar han mostrado su rechazo este martes al anuncio de la dirección de Navantia de que va a tomar "medidas drásticas" por la situación económica que vive la empresa y que afecta directamente a dicho sector auxiliar. Coincidiendo además con la segunda jornada de huelga del sector del metal, poco después de las seis de la mañana han protagonizado numerosos actos vandálicos en la carretera de acceso a la factoría isleña con el destrozo de farolas e incendios de contenedores y vegetación, protegiéndose con barricadas de la acción policial.
Una situación que ha derivado en que la práctica totalidad de los trabajadores que pertenecen a la plantilla del astillero isleño no hayan podido acceder a su puesto de trabajo, quedándose todos ellos a la espera de que pasasen los incidentes a la altura del polígono de Puente de Hierro, donde se han formado durante varias horas colas kilométricas.
Poco después del inicio de los incidentes se han personado en la zona varios furgones de la UIP (Unidad de Intervención Policial) para disuadir a los manifestantes, que se han atrincherado detrás de la puerta de acceso a Navantia, desde donde se ha iniciado un intercambio de lanzamiento de pelotas de goma entre los agentes antidisturbios y de tornillos, piedras, tuercas y varillas de soldar por parte de los trabajadores. Incluso la garita de acceso a La Carraca ha sufrido desperfectos como consecuencia de los lanzamientos por parte de los trabajadores del sector industrial. También han estado presentes miembros de la UPR (Unidad de Prevención de la Policía) y agentes nacionales de la Comisaría isleña.
Pasadas las doce de la mañana la situación se ha calmado y los miembros del comité de empresa de Navantia han salido a dialogar con los agentes para pedirles permiso y acercase hasta las inmediaciones del polígono de Puente de Hierro para que la plantilla pudiese entrar a completar su convulsa jornada laboral. A renglón seguido, la Policía se ha ido replegando poco a poco.