Sostiene que las especies actuales son resultado de mutaciones genéticas que generación tras generación les han ayudado a adaptarse al entorno
La teoría de la evolución del naturalista inglés Charles Darwin, que explica la diversidad de las especies y su capacidad para adaptarse al entorno, se considera uno de los mayores logros científicos de la historia de la humanidad, sin embargo, menos de la mitad de los universitarios españoles saben lo que es, según un estudio publicado en la revista Plos One.
La teoría, explicada en el libro "El origen de las especies" a finales del siglo XIX, sostiene que las especies actuales son resultado de mutaciones genéticas que generación tras generación les han ayudado a adaptarse al entorno, un proceso que denominó 'selección natural'.
Para Darwin, la especie humana actual (Homo sapiens sapiens) no era una excepción, sino que también evolucionó por selección natural y selección sexual, una teoría que en su día -y todavía hoy- sigue generando rechazo y polémica en ciertos grupos sociales y religiosos.
Para conocer el nivel de conocimiento y aceptación que existe de la teoría de la evolución en España, un equipo de investigadores ha llevado a cabo un estudio entre estudiantes de tercero de Química, Filología Inglesa, Historia y Biología, de diez universidades públicas españolas.
La investigación se realizó en el curso 2018-19 entre 1.050 estudiantes de las universidades Autónoma y Universidad Complutense, en Madrid; las de Vigo y Santiago de Compostela, en Galicia; las de Sevilla y Granada, en Andalucía; la Universidad de Salamanca; las de Valencia y Alicante, en la Comunidad Valenciana; y la de las Islas Baleares.
Los resultados, publicados en Plos ONE, revelan que la aceptación de la evolución es relativamente alta (87,2% de los encuestados) mientras que el conocimiento de la teoría es mediocre, un 5,4 sobre 10.
"El análisis estadístico desvela que el conocimiento de la teoría evolutiva entre los estudiantes de biología es mayor que en las otras tres especialidades y eso se explica parcialmente por el peso relativo de los temas evolutivos dentro de sus planes de estudios", señala Inés Álvarez, investigadora del CSIC en el Real Jardín Botánico y coautora del estudio.
Sin embargo, el nivel de conocimiento en los estudiantes de esta carrera apenas supera el aprobado, mientras que suspenden en los otros tres grados (Filología, Química e Historia).
"Es decir, cursar 3 años de biología no da a los alumnos un armazón lo suficientemente robusto para destacar en aspectos básicos de una teoría clave de su ámbito. Algo que no era esperado ni deseado", lamenta la investigadora.
El estudio concluye que, dados los resultados, urge "revisar los conceptos sobre la evolución en los currículos docentes de nuestro alumnado" en Primaria y Secundaria porque queda claro que los estudiantes llegan a la universidad sin saber qué es esta teoría.
"Es clave empezar a formar al profesorado de estos niveles desde el ámbito científico o académico en esta materia para que puedan impartir la teoría evolutiva de forma adecuada a cada nivel.