Las fuertes rachas de viento registradas durante el fin de semana en la provincia de Granada han dañado al menos cinco hectáreas de invernaderos en la costa tropical, así como las producciones tardías de chirimoyas y aguacate.
El secretario de COAG Granada, Miguel Monferrer, ha detallado a Europa Press que el primer balance de daños evidencia que al menos diez invernaderos situados entre la Mamola y Castell de Ferro han quedado dañados por roturas en los plásticos y en la estructura.
En la mayoría de estas instalaciones se estaban cultivando pepinos, una especie "muy delicada" que "no aguantará más de dos días" con vida en las zonas donde los plásticos estén rotos, por lo que las producciones afectadas tendrán que ser arrancadas.
En el entorno de Almuñécar, el viento ha afectado algunas producciones tardías de chirimoyas y de aguacates, aunque la campaña de recogida de este último fruto subtropical casi ha terminado.
En este caso no se prevé perder producción, especialmente en lo que se refiere a las chirimoyas, aunque la caída del fruto y el rozamiento de las ramas le hará perder calidad.
Aunque el fuerte viento ha dañado producciones agrarias a su paso, el secretario provincial de COAG Granada se ha congratulado de que no hayan sido cuantiosos, en parte, según ha dicho, porque los agricultores eran conocedores de las circunstancias climatológicas y habían preparado sus explotaciones.
Además, Monferrer confía en que los seguros se hagan cargo tanto del coste de las invernaderos que deben ser reparados como de las pérdidas de la producción de pepino, que por norma general no suele ser un cultivo problemático en ese sentido por ser conocida "su extrema fragilidad".