El superviviente Salvador Guzmán ha pedido hoy que el éxodo de civiles que se produjo el 7 de febrero de 1937 desde Málaga a Almería ante el avance de las tropas franquistas deje de llamarse "Desbandá", pues el término es más propio de los pájaros que de los seres humanos que sufrieron la masacre.

Guzmán ha recibido hoy en Málaga el Premio del Día de Andalucía junto a otra superviviente de la conocida como "carretera de la muerte" Amparo Gallardo, y ha mandado un "abrazo muy fuerte" a todos los que hicieron el camino Málaga-Almería, frente a los periodistas.

La nieta de Gallardo ha hablado por ella y ha agradecido a la Junta "esta gran reseña" que les ha hecho a los dos, los cuales "son unos valientes" que han sobrevivieron al éxodo "con mucho esfuerzo".

Salvador ha explicado a los periodistas que aquello fue más trágico que lo que pueda contar; él tenía seis años cuando los primeros proyectiles que dispararon los buques Almirante Cervera y Canarias impactaron en el coche donde él iba, a la altura del Arroyo Jabonero en el distrito El Palo de Málaga.

"Logramos meternos detrás de la fábrica de cemento donde hacía la carretera un corte" y en este lugar les acosaron desde las 11 de la mañana aproximadamente hasta las cinco de la tarde, ha continuado, y ha explicado que "allí hay pedazos de criaturas", incluso dos de su pueblo a los que "hubo que echarles cachitos de trapos por encima".

También ha especificado que la primera muerte la vio cerca del barrio malagueño del Limonar, donde un padre, "como aquello era imposible", cogió la pistola y mató a su mujer, hija e hijo, antes de suicidarse.

Además de estos ancianos, la Junta de Andalucía ha premiado a la actriz Belén Cuesta, al ingeniero y ganador de un Oscar, Marcos Fajardo, la panadería La Curruca de Coín, el ingeniero al frente del Plan Infoca en Málaga, Miguel Ángel Catalina, la patrona de la Cofradía de Pescadores de la Caleta de Vélez, María del Carmen Navas, el IES Guadalmedina, Canal Sur y la Federación de Mujeres de la Comarca Nororiental de Málaga.

La consejera de Educación, Adelaida de la Calle, ha sido la encargada de entregar las distinciones y ha destacado los grandes avances de Andalucía durante las últimas décadas, así como ha resaltado el esfuerzo de su pueblo para cambiar la historia y el destino de la comunidad autónoma.