La sobrecarga de
pisos turísticos en el centro histórico de Málaga, que ascienden a casi 4.800 si se busca en la plataforma AirBnb (y son
4.260 personas las censadas según los últimos datos del INE) no es un problema que “esté en las manos” del Ayuntamiento, según De la Torre. El regidor defiende que esta problemática debe solucionarlo una regulación autonómica, nacional y europea.
“Es un tema a regular que debemos convertir en algo positivo y no negativo. Nosotros nos hemos acercado al tema para ver si podemos tomar iniciativas locales, pero hasta que no haya
regulación autonómica, que depende de la
regulación nacional, y que a su vez depende de la
europea, no podemos actuar con eficacia".
El regidor, por tanto, justifica que es muy difícil regular los pisos turísticos de manera unilateral y lo que plantea es que este tipo de viviendas sean de la máxima calidad, sin que perjudiquen al bienestar de los vecinos del Centro. ¿Cómo? Con medidas como la instalación de sonómetros en dichas viviendas para “evitar que se distorsione la convivencia vecinal”.
“No es nada fácil”
La solución del Ayuntamiento de Málaga es, por el momento, intentar evitar los efectos negativos de esta masificación turística con la actuación de la Policía Local, imponiendo las
sanciones correspondientes, y con las
inspecciones de Medio Ambiente.
“No es nada fácil regular mientras no haya regulación estatal en coordinación con las autonomías. Es una problemática que coincide con otras ciudades.Trataremos de buscar elementos que no solo sean los sonómetros”, continuó el alcalde de la ciudad.
En su respuesta, añadió que
apuesta más por el crecimiento en hoteles que en los inmuebles turísticos al considerar que generan más empleo directo. Por su parte, el PSOE Málaga propone “crear una moratoria, en colaboración con la Junta de Andalucía, para que durante los primeros 20 años de las nuevas viviendas en carga no puedan ser alojamientos turísticos, para así frenar esta tendencia que aumenta los precios del alquiler y aleja a los malagueños de su centro.
En este sentido, el socialista ha recordado su compromiso como alcalde después de las elecciones de mayo de “construir 10.000 VPO con un tope de 150.000 euros”, dando “respuesta” a un alto porcentaje de demandantes de vivienda protegida en la capital, que son “más de 25.000”.