Una niña de cuatro años, vecina de Jerez, murió atropellada la tarde del pasado martes en el camping La Rosaleda, en Conil, cuando cruzaba con su hermano de seis años por uno de los viales del interior del recinto privado y fueron arrollados por un Mitsubishi 4x4 de alta gama.
Sus padres y otros amigos habían elegido este camping familiar para pasar el puente del Día de Andalucía y cerca de las cuatro de la tarde, según las primeras investigaciones, los dos hermanos regresaban de la zona de los baños para seguir jugando con el resto de niños, entre los que se encontraba la hermana melliza de la fallecida.
Según apuntan fuentes de la Guardia Civil, la pequeña murió en el acto mientras que su hermano, que permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Puerta del Mar, fue “desplazado” por el impacto. Las mismas fuentes precisan que el conductor, de nacionalidad suiza, dio negativo en las pruebas de alcoholemia y drogas practicadas en un caso del que se ha hecho cargo la Policía Judicial de la Guardia Civil de Chiclana para investigar si hubo o no exceso de velocidad por parte del conductor. Hay que recordar que la normativa para este tipo de recintos turísticos contempla los 10 kilómetros por hora como velocidad máxima permitida para turismos y vehículos de motor en el interior del complejo. No obstante, a priori la investigación policial deberá tener en cuenta otras circunstancias, como es el hecho de que el todoterreno circulaba en sentido “descendente” en la calle donde se produjo el atropello, la posible irrupción de los pequeños corriendo en el vial y la pared que había a la salida de los servicios que desde la altura del vehículo complicaba presuntamente la visibilidad, apuntan las mismas fuentes consultadas, que tampoco descartan una distracción por parte del conductor. Aunque no fue detenido, se le hizo lectura de sus derechos al estar investigado en un accidente mortal. Hasta el lugar de los hechos se trasladaron efectivos de la Guardia Civil, de la Policía Local de Conil y a efectivos sanitarios de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES), que no pudieron hacer nada por salvar la vida de la pequeña en unos momentos especialmente delicados y dolorosos entre sus familiares y amigos, que causaron un gran revuelo en el camping.
Pesar en el CEIP San José Obrero, que declara tres días de luto
A primera hora de la mañana de este miércoles, en el colegio San José Obrero, los padres se llevaban las manos a la cabeza tras conocer el alcance de un suceso que ha conmocionado a toda la comunidad educativa y a la ciudad entera. Se da las circunstancias de que los pequeños son hijos de un policía nacional, y que sus padres son muy “participativos” y “muy conocidos” en el centro, donde su madre da clases de teatro. “Está todo el mundo destrozado”, reconoció el director del colegio, Agustín Morales, donde se acordó declarar tres días oficiales de luto durante los que las banderas del colegio lucirán un crespón negro en señal de duelo. Por su parte, el Ayuntamiento de Jerez también decidió, después de que lo hiciera el centro, sumarse al pesar de la familia de la menor declarando tres días oficiales de luto en la localidad.
Los restos de la menor fueron trasladados ayer al Tanatorio de Jerez, donde este jueves a las 09.00 horas tendrá lugar su funeral por su eterno descanso en la Iglesia de Cristo Resucitado para posteriormente darle sepultura en el cementerio de Nuestra Señora de La Merced.
Un camping que cumple las normas
Los campamentos de turismo, como es el caso de La Rosaleda, tal y como apuntan desde la Junta, cuentan con un reglamento de régimen interior, en las condiciones y con los requisitos exigidos en el art. 39 del presente decreto, en el que se fijarán las normas internas de obligado cumplimiento para los usuarios. Otra norma fundamental es el art 21.4, según el cual la velocidad máxima permitida es de 10km/h y así lo informarán las señales en los viales principales de acceso.