La teniente de alcaldesa de Empleo, Recursos Humanos y Deportes, Laura Álvarez, aseguró ayer no compartir la “visión tan dramática” que IULV-CA tiene sobre la situación actual de Onda Jerez Radio y Televisión, lo que incluso llevó a esta formación política a expresar su sospecha de que el Gobierno local estuviera tratando de dejar morir “por inanición” a este servicio público.

Álvarez admitió que el Ayuntamiento está encontrando dificultades para habilitar el mecanismo que permita a la radio y televisión municipal la obtención de ingresos por publicidad, una vía de ingresos que se encuentra paralizada desde la disolución de la empresa pública Jecomusa.

En este sentido, la teniente de alcaldesa lamentó que “las personas que propusieron la incorporación” en el Ayuntamiento de Onda Jerez no hubieran resuelto esta situación, en la que están trabajando ahora tres profesionales del gabinete jurídico municipal.

El portavoz del grupo municipal de IULV-CA, Raúl Ruiz-Berdejo, defendió ayer en el Pleno municipal la externalización del servicio de gestión de la publicidad, un mecanismo que según Álvarez impediría el aprovechamiento del cien por cien de los ingresos.

Por otra parte, la teniente de alcaldesa anunció en Pleno que el Ayuntamiento ya dispone del informe jurídico que permitirá la reincorporación de cuatro trabajadores fijos discontinuos, imprescindibles según IULV-CA para realizar conexiones en directo con el exterior. Ahora trata de resolverse la incorporación de una quinta persona, que se encontraba en excedencia cuando se llevó a cabo el proceso de absorción.

El grupo municipal de IULV-CA había calificado de “límite” la situación que está viviendo Onda Jerez RTV, hasta el punto de que tiene constancia de que “no se pueden comprar pilas” para el desarrollo normal del trabajo o de que los empleados “tienen que llevar su propio papel higiénico para ir al baño”.

De igual modo, esta formación política cuestionó el traslado de personal de la radio y televisión municipal a otras dependencias del Ayuntamiento, asegurando que en algunos casos estos empleados están desempeñando ahora funciones ajenas a las que le habían sido asignadas en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT).