En los tiempos que corren ser contratado a jornada completa en una administración pública por seis meses es cómo si te tocara la “lotería del trabajo”. No solo los beneficiarios se garantizan unos ingresos mensuales fijos durante medio año nada desdeñables, sino que además esta oportunidad les reportará una experiencia para el futuro.
Esa es la idea con la que han sido concebidos los planes de empleos a los que se han adherido los ayuntamientos tras el decreto aprobado por la Junta, el problema es que la puesta en marcha de estos programas, al menos en el de Jerez, está poniendo en evidencia la “mala planificación” de la institución municipal, a juzgar por las quejas que están realizando propios trabajadores municipales y lo que trasladan los flamantes contratados.
Sin contar con el Programa Emple@+30, que le da continuidad y ya está en marcha, a falta de las últimas contrataciones en otros departamentos, sólo en el Emplea Joven en el Ayuntamiento de Jerez se ha dado trabajo a los 442 parados de entre 18 y 29 años seleccionados por las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) de acuerdo a su perfil para los puestos solicitados por el propio Consistorio en el periodo comprendido entre noviembre de 2014 y abril de 2015.
Sin embargo, debido a la “nula organización”, según apuntan en las secciones sindicales, la mayor parte ha empezado a trabajar poco antes de las navidades, dándose el caso de jóvenes a los que en Recursos Humanos los ha mandado literalmente a casa, dándoles vacaciones “forzosas” (los 12 días que les corresponde antes de empezar).“Entran para trabajar y coger experiencia y lo que cogen es experiencia en vacaciones, lo cual les descuadra bastante. Hubiera sido más lógico que esperaran a que hubieran avanzado un poco”, señalan los representantes sindicales consultados por este periódico.
No es la única situación “surrealista” con la que se están encontrando los beneficiarios de este programa, ya que la supuesta falta de interés en estos programas por parte del Consistorio a la hora de ponerse las pilas y organizar el destino de esta bolsa de trabajadores durante estos seis meses se ha traducido en áreas municipales “masificadas” donde es fácil toparse con tres “chavales” compartiendo una mesa “y sin trabajo” y “sin nadie que les enseñe o les supervise lo que hacer”. De hecho, en las primeras semanas de esta experiencia en delegaciones como Juventud, apuntan estos sindicatos, “cualquiera podía comprobar que estos jóvenes se pasaron los primeros diez días sentados en un banco porque no tenían nada que hacer”.
Desorganización
Otra prueba de la “horrorosa desorganización” que está caracterizando a este Plan de Empleo Joven es su gestión en las barriadas rurales y pedanías, desde donde se ha realizado el 30% de las contrataciones. “En Guadalcacín y La Barca tuvimos que dar las quejas porque habían puesto a barrer y sin el uniforme (guante, ropa, calzado) a peones de jardines y albañilería. Otra dificultad que se están encontrando es que están mandando a las pedanías a gente que es del casco urbano y se tienen que desplazar y a la inversa”.
Los sindicatos tienen claro que en el caso de un Ayuntamiento como el de Jerez, que hizo un ERE en 2012 que dejó en la calle 260 trabajadores municipales “habría que guardar las formas” y no haber optado por gestionar este programa “a la carrera y a mala gana”, como aseguran que así ha sido. “La impresión que se van a llevar del Ayuntamiento es nula, como si se llevaran el dinero sin trabajar, cuando el plan no está mal concebido”.
Pero, ¿a qué se debe esta situación? Los representantes de los trabajadores creen que de nuevo se trata de un trasfondo más político que de otro tipo. “El Ayuntamiento accedió a regañadientes a este programa de la Junta, y por eso no se ha molestado en organizar previamente porque hay muchos trabajos especiales que no se hacen y mucha tarea por hacer que podían estar realizando estas personas”.
La cara más amable de esta iniciativa
La denuncia de los sindicatos es la parte negativa de unos planes que también están posibilitando el desarrollo de interesantes proyectos que se ven eclipsados por estas críticas. Es el caso del plan ‘Qué falta en tu barrio’ para la detección de oportunidades de negocio por distritos para el que los jóvenes están haciendo encuestas, el estudio de locales comerciales, un mapa de actividades económicas con un análisis de actividades económicas y geolocalización; un censo de espacios productivos de polígonos empresariales y empresas, un servicio de orientación para el empleo en la zona rural, o el conocido como ‘Libro de ventas de Jerez’, para promover las virtudes de Jerez para atraer inversores. “Se están haciendo cosas muy interesantes con estos jóvenes”, indican otros trabajadores municipales.