La noticia que, en exclusiva, adelantó ayer Viva Jerez en torno a los movimientos próximos de Energy, ahora asesorados jurídicamente por el bufete sevillano Salas & Donaire, fue un impacto total en la ciudad y recogida por los distintos medios radiofónicos y digitales. Joaquín Morales no quiso entrar a valorar el tema y zanjaba el asunto con  un “no voy a hablar”, aunque en conversación con este medio matizó que se sentí “tranquilo” y confiado “en la justicia”, aunque mostraba su pesar porque “se mezclen temas personales, que solo me atañen a mí, con mi presencia en el Xerez. No creo que a nadie le interese lo que yo tenga o deje de tener”. En ese sentido, el empresario nazareno pedía “respeto”.  Por cierto que Morales se encontraba ayer en Jerez ya que hubo un almuerzo con los jugadores y los responsables técnicos y también algunos consejeros para celebrar la buena marcha del club. Morales que está siguiendo muy cerca todo el trabajo que se está realizando en el club, tanto a nivel de despachos como de terreno de juego, no perdió la oportunidad de estar con los jugadores.
 Por otra parte, los responsables de Energy tampoco han querido hacer declaraciones respecto a sus últimas novedades y todo hace indicar que están a la espera de que se produzcan los movimientos, de que la querella criminal se presente en tiempo y en forma y ver cómo discurren los acontecimientos a partir de ahora. Parece ser que Francisco Gallardo sigue dentro del club, aunque no se va a ocupar de los asuntos jurídicos, que serán asuntos del nuevo bufete que se encargada de defender al grupo sevillano.
El día después de la noticia avanzada por este medio no dejó indiferente a nadie y ahora habrá que esperar que sean los juzgados los que se vayan pronunciando. Lo que parece claro es que el asunto Luz Costa-Energy no es pasado sino que sigue estando presente en la vida institucional azulina.