Los microgeles son partículas blandas micrométricas formadas por redes de polímeros entrecruzados
Un equipo internacional de científicos ha desarrollado unos microgeles fabricados con nanopartículas de oro con numerosas aplicaciones en el ámbito de la biomedicina, entre ellas diagnosticar y tratar tumores, según ha informado este jueves la Universidad de Granada, que ha participado en esta investigación.
Los microgeles son partículas blandas micrométricas formadas por redes de polímeros entrecruzados, unas partículas que poseen la propiedad de que su tamaño y grado de porosidad puede variar con las propiedades como la temperatura, el PH o la radiación electromagnética.
Dichos microgeles se utilizan en productos de higiene y agrícolas para retener el agua, pero hay novedosas aplicaciones tecnológicas como la administración controlada de fármacos o músculos artificiales.
En el caso de la nanomedicina, el potencial de los microgeles poliméricos es prometedor cuando forman lo que se denominan sistemas híbridos constituidos por microgeles "dopados" con nanopartículas inorgánicas.
Estos sistemas híbridos ya se han usado como nuevos agentes de contraste para la obtención de bioimágenes y en ensayos controlados antibacterianos.
Según ha explicado la UGR, la síntesis de estos materiales híbridos sigue siendo una "tarea ardua" debido a la necesidad de controlar características como el tamaño de las partículas y los niveles de dopaje, para una aplicación determinada.
El mayor logro de la investigación es el de presentar una novedosa estrategia para la formación de partículas híbridas basada en el ensamblaje de microgeles termosensibles con tintes y nanopartículas de oro, mediante sucesivos pasos de incubación.
En particular, este sistema híbrido es un firme candidato "teranóstico", suma de las palabras terapia y diagnóstico, como agentes para la visualización y el tratamiento simultáneo de tumores.
"Mientras los investigadores franceses han realizado todo el trabajo de síntesis y experimental, en España hemos realizado simulaciones computacionales para poder interpretar los resultados y esclarecer los mecanismos físicos que subyacen en la formación de estos sistemas híbridos", ha destacado Alberto Martín Molina, catedrático del departamento de Física Aplicada.