El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se reunirá con el presidente cubano, Raúl Castro, durante su visita a la isla, pero no tiene intención de visitar al disidente Guillermo Fariñas, quien mantiene una huelga de hambre de más de tres meses, para pedir la libertad de 26 opositores encarcelados enfermos.

“Nuestro pensamiento es que, sobre lo que él buscaba, puede sentirse satisfecho y lo que tiene que hacer ahora es trabajar, como todos hacemos, para mejorar la situación de los derechos humanos en Cuba”, ha afirmado Moratinos.

Además, ha defendido la política del Gobierno hacia Cuba frente al “aislamiento” defendido por el anterior Ejecutivo Español.