El Grupo X a falta de la tranquilidad necesaria y de un futuro halagüeño, no deja de sorprender por actitudes quijotescas más propias de una historia kafkiana y bananera. A falta de 10 días para que el telón liguero levante, hoy por hoy, saber algo concreto y fiable de lo que deparará es una incógnita.

La Asociación Deportiva Ceuta tiene una deuda que supera los 100.000 euros y tras su descenso administrativo y la imposibilidad de hacer frente, tiene, por parte de la Federación, los derechos federativos suspendidos. Esta circunstancia le imposibilitaría cursar las correspondientes fichas. Sin ellas y aunque se presente para disputar los partidos, en su segunda reincidencia, sería apartado de la competición. El reglamento es cuanto menos meridiano en este apartado. Y ese parece ser el medio a seguir, pues el objetivo no es otro que la fusión final con el otro equipo de la ciudad, el Atlético de Ceuta.

La normativa de la Federación Andaluza de Fútbol, Art. 51 FAF–Art. 100 RFEF, dice textualmente: “Los clubs podrán variar su denominación, previo acuerdo de su Asamblea General, pero, en todo caso, antes de la finalización de la temporada (30 de junio de 2011), para que tenga vigencia a partir de la temporada 2011-2012“. Requisito que, al parecer, no se ha cumplido.

Según publica el portal cordobés minuto90 apuntando a una fuente consultada, “Muñoz (presidente de la AD Ceuta), mantendrá al equipo en competición, si bien no se presentará a los dos primeros partidos, lo que conllevará su expulsión de la liga”.

De cumplirse, la competición quedará con 19 equipos tras apuntarse, del mismo modo, que el Montilla, el que debiera ascender, tendrá que militar otra temporada en la Primera Andaluza cordobesa.

En la otra acera, el Atlético de Ceuta, continúa sin entrenar en lo que algunos apuntan servir a modo de cortina de humo para desviar una atención y un futuro que parece claro: la fusión entre ambas entidades caballas. Un dato que no ha pasado inadvertido es que tanto el exracinguista Pepe Martínez y el portero Garrido, exjugadores del Atlético de Ceuta la temporada pasada, se han comprometido con los del Alfonso Murube.

El Racing Portuense y con el calendario oficial en la mano, debe viajar a la Ciudad Autónoma el 14 de octubre para enfrentarse al AD Ceuta. El 23 de diciembre, en lo que debe ser el último partido del año y penúltimo de la primera vuelta, tendría que hacerlo ante el Atlético de Ceuta, también en tierras norteafricanas.

Tener que descansar, obligatoriamente una semana también traerá, al menos, una ventaja, como es el hecho de no tener que hacer frente a un doble desplazamiento, con lo que ello repercute económicamente para el club.

El esperpento continúa y con los ojos del resto de equipos, que no sabe a que atenerse, centrado en los movimientos que se suceden al otro lado del Estrecho y que, a buen seguro, tendrá en los próximos días más capítulos a un culebrón del que no parece tener fin.