El español Fernando Alonso (McLaren- Honda), que sufrió el pasado domingo nuevos problemas con la escasísima competitividad del motor de su monoplaza y tuvo que abandonar el Gran Premio de Bélgica, en Spa-Francoprchamps, es consciente de que el próximo, el de Italia, tampoco le irá "bien" y sabe que Monza "será un difícil desafío".
"Al igual que Spa, Monza es uno de esos circuitos legendarios en los que todo el mundo disfruta viendo a los coches correr. Con los nuevos monoplazas de este año, más anchos y más rápidos, será sin duda otro de los circuitos en el que se verá una nueva vuelta rápida y unas velocidades increíblemente elevadas en las rectas", explicó Alonso, en declaraciones difundidas por su propia escudería.
"Es el circuito más rápido del calendario en términos de velocidad punta y para un piloto es una sensación increíble correr por esas emblemáticas rectas, mezcladas con estrechas chicanes y curvas rápidas que requieren de un grado de compromiso muy alto", indicó.
"Siempre hemos dicho que este circuito no le iría bien a nuestro paquete, así que entendemos que será un difícil desafío", advirtió el ovetense.
"Aunque se trate de una pista parecida a la de Spa, que requiere de mucha potencia, son distintas en muchos aspectos. La de Spa es una carrera larga, mientras que el circuito de Monza es corto y abrupto, y la carrera siempre se pasa volando", comentó Alonso.
"Lo que más me gusta de Monza son sus aficionados. Incluso cuando no vas vestido de rojo tifosi, los fans aparecen con fuerza y muestran mucha pasión con las carreras y con el automovilismo", indicó el doble campeón mundial asturiano (2005 y 2006, con Renault).
"El Gran Premio de Italia es uno de los favoritos para mucha gente; se merece, sin duda, su legendaria reputación de circuito mágico para los aficionados a las carreras", afirmó Alonso en las declaraciones difundidas por la escudería de Woking.