El CB Canarias puede seguir soñando con meterse en la fase final por el título después de vencer a domicilio, con nueve jugadores y sin Saúl Blanco, a un flojo La Bruixa d'Or Manresa por 86-93.
El equipo catalán se rompió en el tercer cuarto y, aunque lo intentó, con un gran Hanga (28 puntos y 37 puntos de valoración), no fue capaz de poner en peligro la victoria visitante.
Los canarios dominaron los primeros minutos de partido gracias a un inspirado Sekulic, que anotó 7 de los 9 primeros puntos de su equipo (6-9, min. 4), pero los locales reaccionaron y, liderados por Hanga, llegaron al final del primer cuarto con ventaja (25-21).
En el segundo continuó la igualdad en el marcador. A pesar de las faltas, el CB Canarias mantuvo bajo control a un Manresa que tardó casi cuatro minutos en conseguir la primera canasta en juego y que llegó al descanso cinco punto abajo (43-48).
El arranque del CB Canarias después del descanso no pudo ser mejor. Con un parcial 11-2, se puso 14 puntos por delante (45-59, min. 23) y poco después dominaba el marcador con 19 puntos de renta (53-72, min. 27).
DeVries y Hanga redujeron la diferencia y el Manresa se acercó a nueve puntos al acabar el tercer cuarto (65-74).
En el último, la osadía de Hanga y un equipo canario con síntomas de relajación dieron emoción al duelo.
Hanga encadenó un mate con un robo de balón que culminó en un triple que acercaba peligrosamente a los locales (77-81, min. 34). Richotti volvió a marcar las distancias con un triple (80-88, min. 36) y una canasta de Asselin puso el 86-90 en el marcador a falta de 1'55 para el final.
Era la última esperanza del Manresa, que una vez más esta temporada decepcionó. Entonces llegaron los fallos locales y el CB Canarias se llevo la victoria.