Desde hace ya unos días, el alcalde, José María González, ha recortado su agenda de actos e incluso pospuso el Pleno sobre el Debate de la Ciudad al encontrarse indispuesto. A pesar de ello, el regidor ha acudido a varios actos, entre ellos, a la recepción oficial al exfutbolista del Cádiz CF, Mágico González, el pasado jueves en el Ayuntamiento. Eso sí, su aspecto físico denotaba cansancio y dejaba entrever algún problema de salud.
En una ciudad como Cádiz, los rumores se disparan, algunos con más acierto que otros, y algunos con peores intenciones que otros. Y es que aunque digan que en política no todo vale, muchas veces ese axioma no se cumple y a esta medio han llegado versiones que son verdaderas barbaridades.
Desde el Ayuntamiento se remitió una breve reseña informativa a los medios en la que se indicaba que “José María González está pasando un proceso vírico que le obliga a estar en reposo desde su domicilio bajo recomendación médica” por lo que “ha despejado su agenda en el Ayuntamiento, no obstante está atendiendo los asuntos de la ciudad desde su casa”.
Ayer, fuentes municipales reiteraban que “el alcalde no ha atendido a la agenda en el Consistorio pero sigue trabajando. De hecho, se han remitido varias notas de prensas con comunicados suyas, estuvo en el acto de Mágico, mañana (por hoy) va a estar en el Pleno de la Diputación y el viernes asistirá al Pleno de los Presupuestos”.
Ocurre que “le han diagnosticado reposo y está en su casa, desde donde trabaja, de hecho sigue firmando decretos y otras cuestiones. En el Ayuntamiento de la agenda se hace cargo Ana Fernández, edil de Presidencia.
E insisten en que “está activo, está operativo, está con el teléfono, el ordenador, se le llevan cuestiones para que las firme, pero el médico le ha mandando reposo” por el proceso vírico que padece y por ello está en su casa.
Se desconoce qué proceso vírico es el que padece, aunque desde otras fuentes hablan de Hepatitis A, que precisamente es “una enfermedad vírica cuyos síntomas suelen ser leves en la mayoría de los casos con un período de incubación es de 15 a 60 días”. Pero este punto no está confirmado, de hecho, otras fuentes indican que es un “rumor” que “solo busca hacer daño”, aunque es el más extendido, pero no el único.
De todas formas, de ser verdad, no es grave porque el virus hepatitis A, la más leve de esta enfermedad, puede infectar a quienes ingieren agua o alimentos contaminados con materia fecal, o por contacto personal. De hecho se puede enfermar al cambiar unos simples pañales.
Lo que sí es cierto es que el alcalde ha seguido trabajando a pesar del estado de su salud.
No en vano, incluso ha firmado un decreto de modificación de delegaciones y según fuentes municipales, desde hoy retoma agenda fuera de su casa, con la asistencia esta semana a dos sesiones plenarias. El único hándicap es que tiene que mantener reposo por recomendación médica hasta que se recupere, que esperemos sea lo antes posible.