La irregularidad en la que se encuentra la Planta Municipal de Tratamientos de Escombros, careciendo de permisos, ni siquiera medioambiental, ha desbocado en el expediente sancionador que ha puesto en marcha la Junta de Andalucía y que el próximo siete de agosto acabará con el cierre de las instalaciones.

Así lo informó la alcaldesa de Archidona, Mercedes Montero, quien confesó que tienen conocimiento de la citada irregularidad desde la toma de posesión, por una falta grave que puede suponer para las arcas municipales una multa de entre 240.000 y 2 millones de euros.

La regidora mostró su esperanza de que disminuya la sanción con las medidas que desde el Consistorio van a llevar a cabo. Montero mantuvo una reunión con el delegado de Medio Ambiente de la administración andaluza en Málaga, Adolfo Moreno, iniciando un calendario de actuaciones para regularizar la planta.

Sin embargo, la planta no podrá ser legalizada en su actual enclave al ubicarse sobre un antiguo vertedero ya sellado, según informó el obras, Pablo Gálvez, quien apuntó que sería necesaria la búsqueda de otro emplazamiento con informes favorables urbanística y medioambientalmente.

Así, el concejal subrayó, que tras el cierre de la planta será la asociación AGRECA la encargada de ofrecer servicio a los usuarios con una alternativa para el reciclado de escombros.

Asimismo, desde el Consistorio pretenden llevar los escombros de mayor volumen a las plantas de tratamiento de Valsequillo o de Cuevas, mientras que se pone en marcha una planta de transferencia en la localidad “en la que se seleccionará el escombro para que este llegue más limpio a las plantas de tratamiento y por tanto el importe a pagar sea mucho menor”, indicó Gálvez.

El concejal de Obras ha pedido disculpas a los vecinos por las molestias causadas, pero afirma que esta situación es debida a la mala gestión del anterior equipo de gobierno.