El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha criticado este viernes la "confrontación política" de la Junta y su negativa a aceptar las nuevas medidas acordadas en el seno del Consejo Interterritorial de Salud sobre condiciones de apertura de la hostelería y locales de ocio nocturno, al tiempo que ha apuntado que en esta comunidad estamos en unas cifras de contagios "que no conseguimos bajar".
En declaraciones a Canal Sur Radio, recogidas por Europa Press, Fernández se ha pronunciado así después de que la Junta de Andalucía haya tachado de "invasión de competencias brutal" del Gobierno central las nuevas restricciones para luchar contra la pandemia y, por ello, no las acatará.
En opinión del delegado, "no hay motivos" para rechazar estas nuevas medidas, que son más "recomendaciones que obligaciones" y que suponen la adaptación a cada territorio, con un seguimiento en virtud de incidencia de los últimos siete días.
Ha señalado que se ha comprobado que la mayoría de las medidas adoptadas por los consejeros autonómicos de Salud y el Gobierno central durante la pandemia han sido "eficaces y buscaban la homogeneidad" en todo el territorio nacional. Según ha apuntado, de nada que sirve que haya territorios con medidas restrictivas, si el resto no las tienen y sigue existiendo riesgo de contagio, apuntando que en Andalucía estamos en una "cifras que no conseguimos bajar".
Sin duda, según ha señalado, en la posición de la Junta hay un "trasfondo político de confrontación política", de manera que cualquier medida que el Gobierno pone sobre la mesa y que exigiría la "máxima unidad", de forma inmediata, es "reprochada y recriminada" por el Ejecutivo andaluz.
Ha insistido en que el documento aprobado en el Consejo Interterritorial de Salud es una herramienta de trabajo que persigue que haya uniformidad en toda España y que en la lucha contra la pandemia haya un criterio homogéneo a la hora de aplicar unas determinadas medidas.
De otro lado, sobre el regreso de las trabajadoras temporeras marroquíes de la fresa de Huelva a su país, ha manifestado que es uno de los asuntos que el Gobierno central aborda con Marruecos en el marco de las relaciones diplomáticas que existen y ha confiado en que a finales de este me, cuando acabe la temporada, puedan retornar "con absoluta normalidad".
Ha señalado que puede entender la preocupación de los empresarios del sector, pero ha querido dejar claro que "no hay motivo para pensar que cuando llegue finales de junio" esas mujeres no puedan regresar a su país con normalidad.