El ministro de Fomento, José Blanco, denunció ayer que la ejecución del segundo puente está sometida a la “confrontación política de algunos” que llevan a cabo una recogida de firmas para “que vaya más deprisa o se inventan retrasos”.
“Ni va más de prisa ni menos, va de acuerdo al calendario de los Presupuestos Generales del Estado”, afirmó el titular de Fomento, quien ha dicho que el puente es “bien visible” y que no tienen nada que ver “las fotos” que les mandaba un diputado de esa provincia el año pasado con las de este año.
Según Blanco, en Cádiz se da una “paradoja” y es que antes “se ponían vallas para apropiarse del puente de Cádiz como si lo hiciera el Ayuntamiento, y cuando saben que lo hace el Gobierno en colaboración con la Junta ahora se recogen firmas para que vaya más deprisa o se inventan retrasos”. Ha recordado que la inversión en en dicho puente, conocido como el de “la Pepa” porque está prevista su inauguración en 2012 con motivo del Bicentenario de la Constitución de 1812, se eleva a 316 millones de euros.
El segundo puente de acceso a la ciudad de Cádiz será uno de los de mayor altura en Europa con un gálibo de 69 metros y 3,15 kilómetros de longitud total. Será un puente atirantado con unas torres que tendrán 180 metros de altura. Se convertirá en el tercer acceso a la ciudad, junto con el istmo a San Fernando y el puente Carranza.