Dos templos han sido objeto de robos en los cepillos en los últimos tres días. El último de ellos tuvo lugar en la madrugada del miércoles en la iglesia castrense de San Francisco, donde un cepillo de ayuda a Cáritas fue arrancada en su totalidad y otro que se encontraba enfrente, lo fue en parte. Todo apunta a que el autor o autores de los hechos accedió al templo por la casa del cura y después a través del coro del templo. Aunque eso sí, los hechos tuvieron que ocurrir de madrugada, ya que los cofrades de Santa Elena finalizaron tarde a la hora de montar su paso.

La Policía Nacional acudió a primera hora de la mañana a la iglesia castrense, donde registró una huella junto al cepillo arrancado. No se detectaron más robos o daños.

De la misma forma, otro robo de similar característica ocurrió en la noche del domingo en la iglesia del Santo Cristo. Tras forzar la puerta trasera del templo, robaron el dinero existente en el cepillo del Nazareno y el cepillo que la hermandad de los Afligidos tiene destinado a las misiones de los padres dominicos.

La hermandad del Nazareno ya ha retirado el cepillo para evitar nuevos robos y se han reforzado todas las puertas del templo.

Los robos de los cepillos y la ausencia de daños en las imágenes o del robo de rosarios u otros enseres propios, dejan entrever las necesidades por las que pasan muchos isleños.