A las puertas de debutar en Primera División

Ha llegado a lo más alto del fútbol, a Primera, pero currándoselo. No ha sido el fútbol fácil para Chema, el guardameta que el próximo mes de abril cumplirá 30 años y que está a las mismas puertas de debutar en la máxima categoría. Esa categoría a la que él ayudó, de forma fundamental, a conseguir el pasado ejercicio, jugando 41 partidos de los 42 de la competición liguera y encajando 41 goles, a uno por partido, lo que le dejó en tercer lugar, por coeficiente, de la clasificación del Zamora de la categoría, por detrás de Cobeño y Bravo (0,88). A pesar de ser pieza decisiva en el ascenso, Chema ha sido el único jugador del primer equipo, al margen del refuerzo Vigneri, que aún no ha debutado, aunque parece que se le abre la oportunidad de cara al choque de La Rosaleda. Él no se lo quiere creer porque “hasta que no llegue el domingo no sabemos nada. Yo estoy tranquilo y lo que resta es entrenar bien, como siempre, y ver qué es lo que pasa”, confesaba ayer a Manolo Morales en La Palestra de la Cope.
Chema nació en Orihuela el 25 de abril de 1980. Él comenzó a jugar al fútbol como alevín en Escuela Orcelis. Más tarde se pasó a las filas del Orihuela C.F. donde estuvo dos años mientras era infantil. Como cadete pasó a formar parte del Bigastro C.F. donde también estuvo en su primer año como juvenil. En los siguientes dos años como juvenil pasó por el Beniel C.F. en la liga Nacional y finalmente al Ranero C.F. en División de Honor. En la temporada 99/00 Chema comenzaba su vida futbolística como semiprofesional en el Balsicas C.F. en Tercera. En su siguiente temporada pasaba a formar parte del Alquerias C.F. que le traspasó al filial del Real Murcia, desde donde dio el salto a Segunda B firmando con el Alicante C.F.. En el equipo alicantino estuvo hasta la temporada 2005-06. Durante estos años Chema fue cogiendo experiencia y fue una de las piezas claves para que su equipo entrase en la promoción de ascenso a Segunda. Finalmente no se consiguió el ascenso y el Xerez CD lo firmó, con lo que daba el salto a Segunda.
Pero, como siempre, Chema lo tuvo complicado ya que llegó y se lesionó, lo que le condenó a la suplencia al sombra de Julio Iglesias. Jugó en Copa y aprovechó la baja por lesión de Julio para consagrarse debajo de los tres palos. Jugó quince partidos y partía de titular en la temporada 2007/08, pero se lesionó en el décimo partido ante el Sevilla Atlético y le dejó el puesto a Porato que ya sería titular hasta final de campaña. Parecía que el francés iniciaría de titular la campaña, pero fue Chema el que salió y el que se consagró logrando su meta de jugar en Primera División Está en Primera, pero aún no ha debutado, aunque él “estaba esperando mi oportunidad, que podría haber llegado un poco antes, y si de verdad llega intentaré aprovecharla”.
No ha llevado bien esta prolongada suplencia ya que “te das cuenta -comentaba en esa entrevista en Cope- que has hecho algo grande y que eres el único que no ha jugado. Pero te debes a un club y tienes que trabajar. Ojalá me den la oportunidad y demuestre lo que llevo dentro y lo que estoy haciendo en los entrenamientos”.
Jugó en Copa, pero ese torneo ahora mismo no tiene nada que ver con la Liga, ya que lo disputan habitualmente los menos habituales y no se ha estrenado en la Liga. Él ha estado “trabajando muy duro, sin levantar la voz y esperando”.El domingo le puede llegar su ocasión a un hombre que lo que es en esto del fútbol se ha tenido que ganar con mucho trabajo.