La Guardia Civil ha imputado a un hombre un delito de daños en dos explotaciones agrícolas en las que, según la investigación, arrancó unas 8.000 plantas de tomate próximas a iniciar la producción ante una supuesta venganza hacia el propietario de la finca por no haberlo vuelto a contratar de cara a la presente campaña.

   Los hechos han tenido lugar en dos invernaderos ubicados en el paraje Loma del Viento, dentro del término municipal de El Ejido (Almería), donde se arrancaron 6.000 plantas de tomate en una finca y otras 2.000 en una segunda explotación, sin que se llegara a sustraer nada más.

   Los agentes encontraron así un agujero en una de las bandas laterales de cada uno de los invernadero por donde el autor de los hechos habría conseguido entrar a los mismos, según explica en una nota la Comandancia.

   Tras entrevistarse con el dueño de la explotación, los agentes obtuvieron la identidad de una persona que había estado trabajando con él en otras explotaciones agrícolas, y con la cual había discutido en varias ocasiones, de forma que incluso llegó a amenazarlo con arrancar las plantas si no volvía a contratarlo para trabajar en el invernadero.

   Así, los agentes localizaron a esta persona, quien respondió de manera dubitativa las cuestiones planteadas y relacionadas con los hechos. Tras contrastar toda la información obtenida, los agentes imputan a esta persona un delito de daños en dos explotaciones agrícolas. Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de El Ejido.