La delegada territorial de Salud y Familias de la Junta en Jaén, Trinidad Rus, ha mantenido una reunión con el alcalde de Castillo de Locubín, Cristóbal Rodríguez, a quien ha informado sobre la actividad asistencial que se está llevando a cabo en el centro de salud de la localidad, al tiempo que le ha trasladado que la atención pediátrica en el municipio está "garantizada" pese a la baja del facultativo que venía ejerciendo de pediatra.

Trinidad Rus, que ha estado acompañada por la gerente del Distrito Jaén, Jaén Sur, Sandra Moraleda, ha informado de que el servicio de pediatría del centro de salud de Castillo de Locubín se está cubriendo con tres pediatras que se desplazan desde Alcalá la Real para atender a los 242 niños del municipio desde que el pediatra de Castillo de Locubín comenzara una baja laboral a principios de noviembre.

Asimismo, ha anunciado que se retomarán las consultas de pediatría de forma presencial el 26 de enero en el caso de que continúe la baja del profesional que venía prestando servicio a esta población. "De esta forma, continuamos favoreciendo la accesibilidad y la equidad del servicio de pediatría a los residentes de Castillo de Locubín", ha indicado la delegada.

Desde el Distrito Jaén, Jaén Sur se trabaja para la contratación de pediatra en la localidad, tanto para sustituir bajas como permisos, pero "al no disponer de médicos en las bolsas del SAS, no se puede efectuar la contratación".

Rus ha reiterado que la falta de facultativos existente hasta la fecha está directamente vinculada al "abandono de gestión en materia de personal" ya que "no se hizo en su momento un análisis sobre la edad media de este colectivo para tomar medidas". "Ahora nos encontramos con la necesidad de dar cobertura a un gran número de jubilaciones, permisos o bajas por incapacidad temporal sin tener especialistas en las bolsas", ha dicho la delegada.

En el Centro de Salud de Castillo de Locubín, el SAS ha apostado por un modelo personalizado de consulta potenciando la Unidad de Atención de Familiar entre médico y enfermero que "permita una resolución más eficaz y continuidad asistencial".

Hasta noviembre la atención de enfermería se prestaba en la zona de urgencias, haciendo uso de la consulta de recepción de pacientes graves por parte de los tres enfermeros de familia y totalmente alejada de las consultas médicas, que estaban en el otro ala del centro.

Se ha trabajado "facilitando una consulta intercomunicada a cada médico con su enfermero para que el usuario no tenga que realizar desplazamientos en el centro de salud y para que las intervenciones médico-enfermero dirigidas a la salud del paciente sean más accesibles entre ambos profesionales".

Asimismo se han llevado a cabo la modificación de agendas y se ha implementado la consulta de acogida por parte de enfermería para consultas clínicas no demorables que permite "homogeneizar y unificar criterios de evaluación en base a 18 protocolos disponibles".