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Las obras vinculadas a la Línea de Alta Capacidad obligarán a cortar al tráfico Gran Vía este domingo

La obras vinculadas a la implantación de la Línea de Alta Capacidad (LAC) de Granada, que entrará en funcionamiento el próximo 29 de junio, obligarán a cortar el tráfico en Gran Vía durante toda la jornada de este domingo, según ha informado el Ayuntamiento de Granada

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La obras vinculadas a la implantación de la Línea de Alta Capacidad (LAC) de Granada, que entrará en funcionamiento el próximo 29 de junio, obligarán a cortar el tráfico en Gran Vía durante toda la jornada de este domingo, según ha informado el Ayuntamiento de Granada.

   La concejal de Urbanismo, Isabel Nieto (PP), ha precisado en rueda de prensa que los trabajos supondrán el levantamiento y reposición del asfaltado actual, que está muy deteriorado ante la gran cantidad de tráfico que discurre por este punto de la ciudad.

   El corte del tráfico comenzará a las 8,00 horas y se prolongará durante toda la jornada, por lo que se habilitarán rutas alternativas para la circulación, previsiblemente las mismas que se activan cuando se producen cortes puntuales de la Gran Vía a causa de manifestaciones u otros acontecimientos.

   La previsión es que la vía quede totalmente abierta a la circulación el lunes, según ha añadido la concejal de Urbanismo, quien ha enmarcado los trabajos en las obras que se están realizando en diversos puntos de la ciudad para adaptar el trazado y las paradas a la Línea de Alta Capacidad, la cual dispondrá de 15 nuevos vehículos que recorrerán a diario, con una frecuencia de tres minutos, el eje central de la capital.

    Las paradas, un total de 18, serán totalmente accesibles con los nuevos vehículos y contarán con máquinas expendedoras en las que se podrá adquirir el billete o recargar el bonobús, cuya tarifa no cambia. Al billete sencillo se le incluirá un código de barras para el caso de los viajeros que hagan transbordo, algo que no es posible en la actualidad.

   Además, un dispositivo colocado en la parada permitirá a los usuarios validar el billete antes de su subirse al autobús, de modo que se evitarán las colas en su interior.

   Los nuevos vehículos, de una longitud de 19,5 metros y capacidad para 179 viajeros --38 sentados y el resto de pie--, han costado 525.000 euros por unidad, lo que supone una inversión total de 7,8 millones de euros. Ha sido financiado por la empresa concesionaria del transporte público, Rober, y se amortizará en 10 años, tal como establece el contrato para todas las renovaciones de la flota de autobuses.

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